Los rojinegros vuelven a respirar después de un año donde la entidad ha sido una auténtica montaña rusa. Gracias a la derrota del Montilla que marcaba el descenso, los cartayeros disputarán al derbi costero ante el Isla Cristina sin la presión de necesitar una victoria o empate para continuar en División de Honor. Tres entrenadores han pasado esta temporada por el banquillo de la AD Cartaya: Mikel Gandarias, Noé Carrillo y Limón, este último sabedor de que contará también para la próxima campaña.
Mucha autocrítica necesita la entidad rojinegra en esta próxima temporada estival para no volver a caer en los mismos fallos que en la presente. Pese a tener una plantilla que apuntaba a cotas más altas, la inestabilidad en el banquillo y unas últimas incorporaciones que no ha contado mucho (excepto Souto) han destinado a la AD Cartaya a una posición inesperada.
Sea como fuere, la temporada está salvada, por lo que Limón tiene mucho trabajo que hacer junto a la parte noble de club para intentar confeccionar una plantilla más competitiva que no haga infartar a la afición cartayera la próxima campaña.