Asaja ha asegurado que los daños provocados por las fuertes lluvias caídas y las riadas provocadas durante el pasado fin de semana en cultivos e infraestructuras agrícolas de la comarca de la Costa occidental si hubiese existido limpieza en los márgenes de arroyos y carreteras.
De hecho, algunos agricultores calculan que el volumen de las riadas y la acumulación de agua que se ha producido ha sido «un 80 por ciento mayor debido a la suciedad que se acumulaba en los márgenes de las carreteras y en los cauces de los arroyos».
Para Asaja, al igual que ocurre con el monte de cara a los incendios forestales, los cauces de arroyos y ríos y los márgenes de las carreteras deben ser objeto de tareas de limpieza y mantenimiento «de forma periódica”.
De este modo se evitaría precisamente que los objetos y la maleza acumulada actúen como tapón provocando inundaciones y que, en caso de riada, esos elementos no sirvan como material de arrastre que impriman aún más fuerza a la ya potencia devastadora del agua».
