La desesperación por la que atraviesan los trabajadores de la Escuela de Hostelería de Islantilla ha llevado a uno de ellos, Blas Moreno, a acudir al pleno que se celebraba en la Diputación de Huelva para suplicar, arrodillado, una solución no sólo al impago que sufre la plantilla sino también para que siga la actividad docente.
Este empleado llegó incluso a tumbarse en el suelo, boca abajo y en forma de cruz, para reiterar la necesidad de que las administraciones competentes busquen una salida satisfactoria. “La escuela ha sido un buque insignia que ahora se encuentra a la deriva”, aseguró.
Finalmente, el docente de dicho centro formativo fue desalojado después de que el presidente en funciones, José Fernández, le pidiese en reiteradas ocasiones que abandonase la sala y se comprometiese a atenderle una vez concluida la citada sesión plenaria.
de la sala después de que el presidente en funciones, José Fernández, le reiterase su petición de que abandonaraque no era el momento para atenderle.
Precisamente, hoy el delegado de la Junta de Andalucía en Huelva, Francisco José Romero, ha recordado este miércoles a la plantilla de la Escuela de Hostelería de Islantilla que la administración regional espera tener resuelta este mes de septiembre la situación de los consorcios de formación.
A preguntas de los periodistas en rueda de prensa, Romero ha señalado que en septiembre la hoja de ruta para los consorcios estará «confeccionada», lo que dará «más tranquilidad» a los trabajadores.
En este sentido, ha indicado que se prevé que este mes se produzca el nombramiento de los presidentes de los distintos consorcios y en consecuencia el de la Escuela de Hostelería, lo que «permitirá la firma de las dos nóminas que se adeudan» y espera que se retome la normalidad.