El joven onubense Marcos Rosa, de 26 años y que luchaba contra la leucemia desde los 17 años ha fallecido este lunes después de una larga lucha contra la enfermedad, que le llevó incluso a emprender una campaña por la donación de médula. El onubense ha muerto después de estar varios días en coma.
El joven que consiguió encontrar una médula compatible donada por un ciudadano alemán el pasado mes de enero, fue sometido al trasplante a principios de febrero, concretamente llevaba ingresado en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla desde el 8 de febrero para someterse a este trasplante que, finalmente, no ha podido superar, a pesar de que la compatibilidad de la médula era de un 90%.
Tras la operación, Rosa aseguró que esta había sido «una batalla más para salvar mi vida», según dijo a familiares y amigos, y señaló que ha pasado por momentos difíciles porque «ha tenido vómitos y no podía comer bien».
Esta era la segunda recaída del joven onubense al que le diagnosticaron su enfermedad con 17 años, con un 80 por ciento de células anómalas en sangre, que superó con un tratamiento de quimioterapia que su cuerpo aceptó bien, pero antes de darle el alta definitiva con 22 años, le detectaron un ocho por ciento de estas células en su sangre y necesitó otra vez la quimioterapia.
Normalmente el Banco de Donantes de Médula Ósea suele encontrar una compatibilidad en cuestión de un mes, pero Marcos decidió comenzar una campaña para acelerar el proceso y ayudar a otras personas que se encuentren en su misma situación.
Por ello, comenzó esta iniciativa en redes sociales, con los hashtag #Ayudameaconseguirlo y #Donatumedula para que aumente el número de donaciones, la cual recibió un gran apoyo de la sociedad onubense.
Sus hermanos no eran compatibles, por ello recurrió a las redes sociales porque necesitaba encontrar un donante antes de enero.
Descanse en paz.
