El clima de inestabilidad en el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Almonte se cobra su primera ‘víctima’. La hasta ahora teniente de alcalde y concejala delegada de Turismo, Festejos y Usos Tradicionales, Cristina Medina (independiente), ha decidido renunciar a sus competencias y pasar a la oposición.
Medina, que este viernes ha hecho pública su dimisión como miembro del cuatripartito que sostiene el equipo de Gobierno asegura que se ha sentido «maltratada» tanto psíquicamente como politicamente.
De hecho, esta situación le llevó a estar incluso de baja médica por sufrir un cuadro de ansiedad.
La concejala responsabiliza de esta situación tanto a la alcaldesa, Rocío del Mar Castellano, como al teniente de alcalde José María García, ambos integrantes de Mesa de Convergencia (exPodemos). Y los acusa de haber “vulnerado la democracia”, siendo la actitud de ambos de “divide y vencerás”.
Medina, que ha comparecido en rueda de prensa junto al presidente y secretario general de Independientes por Huelva Juan Polo y Manuel Mora, respectivamente, ha anunciado que emprenderá acciones legales por todo lo que le ha ocurrido durante este año.
«Han intentado destruirme en todo momento», ha destacado la edil independiente, que anuncia que seguirá trabajando en defensa de los intereses de Almonte, que fue lo que le empujó a entrar en política.
La marcha de la concejala independiente del Gobierno local, en cualquier caso, no mueve la balanza, ya que el PSOE con seis concejales, PP con tres y Mesa de Convergencia con dos siguen sumando mayoría absoluta, con un total de 11 escaños.
Mientras tanto, en la oposición se encuentra Ilusiona, que curiosamente fue la opción que mayor respaldo electoral obtuvo, con un total de 9 concejales.
