Los vecinos de Gibraleón han acompañado este fin de semana a San Isidro labrador en su tradicional procesión por las calles del pueblo. Son dos días de convivencia posteriores a la romería en el que los olontenses pueden seguir disfrutando juntos de su patrón.
Estos días tan especiales también son una oportunidad para que aquellos que viven fuera puedan volver a su pueblo a vivir sus tradiciones. Incluso hay quien llegó a Gibraleón casi por casualidad y la gran acogida por parte del pueblo hizo que no quisiera volver a irse.
La procesión se ha llevado a cabo durante el sábado y el domingo, como es habitual. El sábado el santo salió de la Iglesia Santiago Apostol y el domingo lo hizo desde la ermita Santo Cristo de la Guadaña. Además, el domingo se celebró una misa en la iglesia Santiago Apóstol. El párroco de la localidad, Don Antonio Cepeda, da su punto de vista sobre la devoción con la que vive el pueblo las fiestas de San Isidro.
Ayer, día 15 de mayo, coincidiendo con la onomástica de San Isidro Labrador, se celebró también una misa en su honor.