Manolo Zúñiga ya hace cábalas para tratar de poner en aprietos al Cádiz en el Ramón de Carranza. El entrenador del San Roque busca la mejor fórmula para tratar de sorprender a los amarillos, a los que ya visitaron en la Copa del Rey en los primeros días de la temporada. Entonces, los locales ganaron con tres goles en seis últimos minutos, después de que en el resto del encuentro los aurinegros fueran muy superiores.
Para repetir el juego y no el resultado, Zúñiga tiene mucho y bueno donde elegir. A día de hoy, no hay ningún jugador lesionado en la plantilla. El técnico manchego ya tiene muchos problemas para hacer una elección de 16 jugadores, el cupo máximo que se puede incluir en el acta. Después se tiene que quedar con 11.
En estas circunstancias, jugadores de gran nivel se quedan en el banquillo o en la grada cada semana. Zule, con mucho protagonismo durante la pretemporada es un habitual de la reserva. Álvaro González, unas de las incorporaciones estrellas al conjunto lepero ni siquiera jugó un minuto en el último partido, frente a la Balompédica Linense. Juanma ha perdido el sitio en el centro de la semana y Boateng ya no es el pulmón del centro del campo con la llegada de Wilson Cuero y la apuesta por dos delanteros.
Akrong, Sabti y Fran tienen que tener paciencia a la espera de una oportunidad en la alineación titular. Son solo algunos de los ejemplos porque las combinaciones son ilimitadas con las 22 fichas cubiertas.
Los aurinegros acuden mañana al Municipal para que Zúñiga le dé otra vuelta de tuerca a una alineación que en los dos últimos compromisos ligueros ha sido la misma. Para la cita en el Carranza, sin embargo, se espera alguna modificación por la particularidad que conlleva siempre el encuentro con el Cádiz.
