El San Roque afronta este domingo a partir de las 19,30 horas su primera salida en la Liga del grupo cuarto de Segunda División B. Los aurinegros visitan al Atlético Sanluqueño, uno de los equipos que lograron el ascenso el pasado verano. En el conjunto aurinegro, no obstante, la excesiva confianza está proscrita. El San Roque es un conjunto en formación, como su rival, y en el inicio de temporada todo resultado es posible.
Los de Manolo Zúñiga competirá en El Palmar con la baza de que desde el primer momento han encontrado un juego competitivo. En la primera jornada liguera derrotaron al Lucena en el Ciudad de Lepe y cuatro días después realizaron un gran encuentro en Cádiz al afrontar la primera ronda de la Copa del Rey. El lunar de los últimos instantes, con tres goles encajados en cinco minutos, quita méritos a un juego brillante durante muchos minutos.
El Atlético Sanluqueño también está en alza, pero por una razón opuesta. El conjunto gaditano perdió en su primer compromiso liguero, en la Línea frente a la Balona, pero ayer dio la sorpresa en la Copa del Rey al derrotar en casa al Cartagena. El esfuerzo realizado en este partido es un factor a favor de los sanrroquista.
El partido que arbitrará Vizuete Sánchez tiene ocho precedentes, todos ellos en Tercera División. Curiosamente, el San Roque rompió en su última visita a Sanlúcar de Barrameda una racha de siete derrotas en los siete primeros enfrentamientos con este equipo en tierras gaditanas. El 0-1 de la campaña 2008-09 le valió a los aurinegros para iniciar su camino hacia el ascenso a Segunda B.
Jugadores y cuerpo técnico han aparcado la incertidumbre institucional con la que conviven para centrarse en la competición y seguir dando alegría a sus aficionados.
