La parroquia Santo Domingo de Guzmán de Lepe acogía hace unos minutos como marca la tradición del 7 de agosto en el municipio, el traslado de la Virgen de la Bella desde su camarín hasta el Altar Mayor del templo. Un acto efímero pero emocionante con el que se da el pistoletazo de salida a los cultos en torno a la Virgen, enmarcados en las Fiestas Patronales en Honor a la Virgen de la Bella y San Roque.
Este acto solemne que conmemora un hecho histórico para la ciudad de Lepe y que se trata de un día señalado en el calendario de los leperos y los devotos que tanta fe le profesan a la Santísima Virgen de la Bella, y que este año celebra su 188 aniversario de la Venida de la Virgen al pueblo.
Día grande en Lepe que se celebra desde hace casi dos siglos con la misma emoción y se vive con la misma intensidad por parte de los fieles. Entre vivas y cantos, los leperos han disfrutado de uno de los momentos más emocionantes y esperados donde la patrona y alcaldesa perpetua de Lepe , ha sido trasladada a manos de sus emocionados y fieles costaleros hasta el Altar Mayor desde donde presidirá la celebración de la novena.
Habiendo transcurrido los actos de manera exitosa y satisfactoria a pesar de la ola de calor que estamos vivivendo, los leperos arrancan sus Fiestas Patronales con ganas e ilusión. Pero ya inician la cuenta atrás para el próximo 7 de agosto.
