La triste noticia nos despertaba un lunes de Pascua. El Papa Francisco fallecía de un ictus cerebral, un día después de su última aparición pública el domingo en la plaza de San Pedro durante el Urbi et Orbi. La comunidad cristiana lamenta la perdida de un hombre que destacó por ponerse siempre al lado de los más débiles. Con personalidad extraordinariamente generosa y solidaria como apuntan quienes lo conocieron.
Daba voz a los que no la tenían allá donde fuera. A los ‘invisibles’, a los más vulnerables, a los pobres, a los migrantes, a los enfermos, a los que tienen muy poco o nada, fueran o no seguidores de la fe cristiana, un papa bueno como lo definen los cristianos y no cristianos.
Ahora, se abre el Cónclave de la iglesia católica que terminará con la elección del nuevo Papa. La comunidad cristiana está a la espera de su sucesor
El papa no llego a visitar España y la Andalucía más mariana ,pero si el pasado Diciembre 120 hermandades del Rocío y cerca de 900 personas participaron en la peregrinación a Roma, que formaban parte de los actos de celebración del 30 aniversario de la visita de Juan Pablo II a El Rocío y mantuvieron una audiencia general con el papa Francisco, en lo que se convirtió en «la más amplia representación institucional del Rocío que peregrina a Roma en la historia».