La jornada del Día del Carmen en La Antilla ha comenzado este martes con un emotivo y simbólico acto: el descubrimiento de un retablo de azulejos dedicado a la Virgen del Carmen, donado por Alberto y Conchi, una pareja que hace justo un año hizo una promesa a la patrona de los marineros. Hoy han cumplido su compromiso ofreciendo este regalo que ya forma parte del patrimonio devocional de la barriada de los Pescadores.
A continuación, dio comienzo uno de los momentos más esperados del día: la tradicional procesión marítima de la Virgen del Carmen. Portada por marineros y acompañada por una multitud de devotos, la imagen de la Virgen recorre en barco toda la costa de La Antilla, cumpliendo con una tradición profundamente arraigada en la identidad de esta localidad costera.
La Asociación de Vecinos, organizadora del evento, volvió a demostrar su incansable labor y su compromiso con el mantenimiento y crecimiento de esta tradición que cada año reúne a cientos de personas.
Una vez más, La Antilla vivió una jornada marcada por el fervor, la tradición y el sentimiento colectivo hacia la Virgen del Carmen. Esta celebración, profundamente arraigada en la identidad marinera de la localidad, volvió a unir a generaciones en torno a una fe compartida que sigue creciendo año tras año, gracias al compromiso de quienes mantienen viva esta emotiva tradición.