El enclave turístico de Islantilla, compartido por los municipios onubenses de Lepe e Isla Cristina, dispondrá a partir de 2026 de dos nuevos acerados peatonales que conectarán la zona norte de este complejo con la zona de playa, favoreciendo así una comunicación accesible para residentes, visitantes y turistas.
La actuación, que dará comienzo en septiembre y supone una inversión de 438.919,37 euros, tiene un plazo de ejecución que expira en el primer semestre de 2026, y se integra en el conjunto de intervenciones que forman parte del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino ‘Entre el Verde y el Azul’, financiado por la Unión Europea con Fondos NextGenerationEU.
La ejecución de estos tramos de acerados accesibles afectará a calles como el Paseo del Golf o Paseo de la Vera, y unirán la zona norte con la zona baja a través de las pasarelas de la carretera A5054, nexos de comunicación para cuya modificación se requiere, en cualquier caso, de autorización por parte del Servicio de Carreteras de la Junta de Andalucía de la Consejería correspondiente, dado que suponen una modificación sustancial de espacios, bajo el dominio público viario1 y zonas de protección de acuerdo con el Art. 62.1 de la Ley 8/2001, de 12 de julio, de Carreteras de Andalucía.
Con esta actuación se da continuidad a la experiencia piloto ya desplegada en uno de los tramos del Paseo Barranco del Moro, en el que se ha ejecutado un acerado accesible y plazas de aparcamientos, y que ha contado con una excelente aceptación, siendo acompañada por la renovación del alumbrado público.
Asimismo, la Mancomunidad de Islantilla está trabajando actualmente en un Plan de Movilidad con el objetivo de mejorar la accesibilidad en las zonas peatonales de este enclave. Este Plan contemplará el resto de opciones a desarrollar para optimizar la conexión entre la zona alta y baja del área.
Actualmente, dicho Plan se encuentra en proceso de aprobación, con expectativas de que sea ratificado en los próximos días. Los principales objetivos propuestos buscan alcanzar los siguientes beneficios:
– Dotar los viales de la zona norte de un recorrido accesible, para que residentes o visitantes puedan transitar garantizando una mejor accesibilidad peatonal.
– Incluir una dotación equilibrada de plazas de aparcamiento de acuerdo con la nueva configuración del vial accesible, que cuente con elementos físicos se dificulten la invasión de los espacios destinados a circulación peatonal por parte de los vehículos.
– Incorporar o facilitar en el vial otras fórmulas de movilidad, ayudando así a minimizar el número de coches, tanto en la zona alta, como el la zona baja, ya que se potenciaría el desplazamiento de la zona del golf a la zona de playa con métodos alternativos de movilidad personal.