El valor de la producción de las industrias asociadas a AIQBE superó por primera vez los 10.000 millones de euros en 2011, un año en el que continuaron las dos claves del ejercicio anterior: un notable incremento de la actividad productiva y una fuerte reducción del margen de explotación como consecuencia del precio de las materias primas y de los costes de producción. En este contexto, el mantenimiento del empleo y la mejora medioambiental permanente son dos de las principales ‘apuestas’ de la citada entidad, según se destaca en el Informe de Sostenibilidad 2012 presentado hoy.
En lo concerniente al empleo, 2011 supuso un freno sustancial a la pérdida de puestos de trabajo de los tres ejercicios precedentes, en los que se concretaron, sucesivamente, cierres o reducción en la actividad de algunas empresas y el fin de los trabajos de incremento de capacidad de CEPSA.
Las plantillas de las empresas asociadas a AIQBE y de las empresas auxiliares se han mantenido prácticamente estables. La cifra total de empleados fue de 5.128, sumando los que pertenecen a las plantillas propias y a empresas auxiliares.
Las inversiones materializadas en 2011 por las empresas de AIQBE fueron de unos 100 millones de euros, volviendo a las cifras habituales del periodo anterior a las grandes inversiones de los últimos cinco años. El dato pone de manifiesto que al margen de proyectos de especial envergadura, como la ampliación de la refinería, las empresas siguen acometiendo mejoras, confiando en la recuperación y con clara orientación al medio y largo plazo.
En una situación de crisis económica generalizada, con pocos sectores que presentan resultados positivos, las empresas de la Asociación de Industrias Químicas, Básicas y Energéticas de Huelva han sabido superar la recesión que sufrieron en 2009 -con descensos en la producción y en la cifra de negocios cercanos al 30%- y en los dos últimos años han alcanzado crecimientos por encima en ambos casos del 40%.
Estos crecimientos han influido en la mayoría de partidas: compras de materias primas y auxiliares, consumo de energía eléctrica y combustibles, servicios de transporte y mantenimiento, etc., lo que motiva una disminución notable del valor añadido bruto y de los márgenes comerciales e indica el esfuerzo que las compañías llevan a cabo para vender sus productos en nuevos mercados que compensen el descenso del consumo nacional. La elevada cifra de exportación, un año más, muestra la capacidad de adaptación del sector.
Son datos del Informe de Sostenibilidad 2012 en el que también se evalúan los efectos de la actividad productiva de AIQBE en el conjunto de la economía provincial. La suma de los efectos directos, indirectos e inducidos se estima en 751 millones de euros de Valor Añadido Bruto –equivalente al 8,6% del PIB de la provincia de Huelva.
Las empresas de AIQBE fueron, por otra parte, contribuyentes significativos de los Ayuntamientos de Huelva y Palos de la Frontera, con 17,2 millones de euros en impuestos y tasas, a los que se suman 4,5 millones de canon de ocupación de terrenos en el Puerto de Huelva, además de las tarifas de las actividades portuarias y el tránsito de mercancías.
A largo de los últimos años, la aplicación de las mejores tecnologías disponibles ha permitido reducir continuamente el impacto ambiental, según se pone de manifiesto en dicho informe, a cuya presentación acudió el director general de Cambio Climático de la Junta, Jesús Nieto, quien mostró el apoyo de la Junta al sector químico de Huelva.
Por otro lado, entre los principales indicadores de comportamiento social destaca la calidad del empleo, con una ratio de contratación indefinida de las empresas que supera el 93%. El salario promedio fue de 45.000 euros anuales, muy superior a la media nacional. El 57% del personal de las empresas procede de la provincia de Huelva.