El Belén Viviente de Beas, organizado por la Hermandad de Nuestra Señora de los Clarines, cerraba un año más durante este miércoles, 1 de enero, su 54ª temporada con una emotiva clausura. Esta histórica muestra navideña, considerada el belén viviente más antiguo de Andalucía, recrea más de 35 escenas de la vida de Jesús y ha vuelto a convertirse en un referente cultural y turístico, atrayendo a visitantes de toda la provincia de Huelva y otras partes de Andalucía.
Este evento se ha consolidado como un clásico navideño a nivel regional, teniendo nuevamente la gran afluencia de escolares y visitantes, muchos de los cuales llegaron en autobuses organizados desde distintos municipios andaluces. Y es que a pesar de la creciente oferta de actividades festivas en otras localidades, el Belén Viviente de Beas mantiene su atractivo único, consolidándose como un símbolo de la Navidad en la campiña onubense y haciendo del municipio la ‘’capital de la Navidad’’.
Habiendo abierto sus puertas de cara al público durante el pasado 30 de noviembre, el Belén Viviente ha hecho las delicias de sus visitantes haciendo un guiño a las 7 maravillas de la provincia, encontrándose entre ellas el propio belén, que es todo un símbolo y referente para los beasinos y onubenses.
